martes, 10 de enero de 2012

 Otra vez esa roca, esa roca que no llora, que no siente, pero a la vez es tan debil, se creía de cal y arena pero es simplemente un trozo de barro mojado. Creía haberlo dicho alguna vez, el amor no existe, pero creí encontrarlo, el amor existe, ahora puedo decirlo, pero es tan debil cuando ninguno de los dos no puede mostrarlo abiertamente. En una relación la frialdad no puede existir, o se destruye, y así paso, cinco meses viviendoen una fantasía, la caída siempre es lenta, pero al final de todo, todo vuelve a ser igual que siempre.